Vivimos en el Valle de Guadarranque, el cual sirve de unión entre los Montes de Toledo y el Macizo de Las Villuercas. Este desconocido y deshumanizado valle alberga las mejores loreras (bosque tipo laurisilva) y una excelente población de murciélagos forestales.

Las Villuercas es una joya geológica, al ser un sistema montañoso de tipo apalachense, sierras paralelas formando valles entre ellas y, peculiarmente, es la única cadena de la península que tiene orientación Sur-Norte. Gracias a estas elevadas sierras y a sus profundos valles, la variedad botánica es muy rica, cohabitando bosques atlánticos y mediterráneos, encontrando castaños, olivos, enebros en gargantas de laurisilva…

Los principales recursos histórico-artísticos, además de en Mérida, se ubican en Cáceres (declarada por la UNESCO Ciudad Patrimonio de la Humanidad), Plasencia, Guadalupe, (su Monasterio también es Patrimonio de la Humanidad), Trujillo, Hervás

A estas poblaciones habría que añadir otras de considerable interés etnográfico, situadas en el medio rural y que cuentan con Fiestas de Interés Turístico Regional, con siglos de tradición.

Entre los espacios naturales destaca el Parque Nacional de Monfragüe, la reserva natural de la Garganta de los Infiernos, y las numerosas Z.E.P.A. (Zonas de Especial Protección para las Aves). Las Lucías está en el corazón de una de estas Z.E.P.A.: Sierra de Las Villuercas y Valle del Guadarranque.

Uniendo patrimonio cultural y naturaleza, el Camino Real de Guadalupe, antigua vía peregrina y que pasa por Las Lucías. Al igual que el Camino de Santiago, este camino puede recorrerse a pie, en bicicleta, a caballo…

La casa rural Las Lucías se encuentra a una distancia privilegiada respecto a grandes ciudades como Madrid, Salamanca, Toledo, Cáceres, Mérida o Ciudad Real, es el lugar ideal para pasar fines de semana y mini vacaciones.

Navatrasierra está a 5 Km, un pequeño pueblo de 200 habitantes extrovertidos y simpáticos.

Guadalupe a 33 Km, donde merece la pena visitar el Monasterio y sus preciosas calles. Camino a Guadalupe disfrutamos de los bosques de madroños, robles, pinos, alcornoques, castaños, olivos… y los animales que nos saldrán al paso.

Cabañas del Castillo es un diminuto pueblo encaramado a la sierra, bajo las ruinas de un pequeño castillo árabe desde donde se contempla la puesta de sol más bonita del mundo entre la infinita dehesa extremeña.

Trujillo a unos 100Km, es cuna de conquistadores, magníficas casas blasonadas, la alcazaba musulmana, la alberca, y su gran plaza presidida por Pizarro a caballo.